¡El arte y las Ganas!

¿Creéis que se pueden pintan cuadros sin otra ayuda que la de la boca?

En efecto, actualmente existen en España personas que, debido a su discapacidad, no pueden mover alguna parte de su cuerpo o prácticamente la totalidad del mismo salvo la cabeza.

Para ser más exhaustivos, os ofrecemos el caso de K. Z, artista plástica que a causa de  una enfermedad llamada Artro Grifosis pinta cuadros con la boca. En su caso, tiene tanto miembros superiores como inferiores inmovilizados y solo puede realizar movimientos con la cabeza.

Pues bien, esta mujer nos ha transmitido ganas de vivir, de afrontar la vida con buen agrado aún siendo consciente de su situación, ante todo con una sonrisa hacia la vida, y sobre todo  con muy buenos recuerdos de su infancia y de su presente.

Además, nos ha parecido interesante la contestación que dio cuando se le realizó la entrevista (realizada por la revista Educación Especial) a la pregunta “¿cómo fue tu escolaridad?”:

“Estamos hablando de un época en la que no se hablaba tanto de la inclusión en el ámbito escolar. Yo hice la parte de Jardín de Infancia y de Primaria en la escuela especial nº… Tuve una experiencia muy buena con maestras que eran unas “genias” con respecto al trato hacia uno buscando estrategias para que yo pudiera hacer las cosas. Fue allí donde aprendí a escribir con la boca…Obviamente cuando era pequeña era terrible, y no quería saber nada de escribir con la boca o hacer cosas con la boca. Me empeñaba en hacerlo con la mano y me ponía el lápiz en la mano y el brazo encima de la mesa…Hasta que un día intenté escribir y dibujar con la oca. En esta etapa la escuela especial fue un apoyo muy importante para mí”.

Que más bello que las ganas de superación de una persona cuyas barreras, se hacen más grandes cada día y no por ello, tiró la toalla cuando era pequeña. Ella quería escribir como lo hacía todo el mundo y es aquí donde el docente tiene que sacar todo su ingenio y habilidad para reaccionar ante esta situación y saber utilizar las estrategias precisas para cada momento.

Por tanto, el papel del docente en el sistema educativo es de vital importancia, y no depende de si ejerce en un colegio ordinario o de educación especial, en absoluto, simplemente tiene que saber actuar en función de las necesidades de cada uno de sus alumnos.

 Así, se hace necesario que todos los profesionales de la educación trabajen en colaboración, con el objetivo de ofrecer una educación de calidad y eliminar cualquier barrera que pueda ser negativa para cualquier alumno, tenga o no discapacidad. Por ello, dado que no somos “magos”, nuestros objetivos tienen que estar enfocados a dar respuesta al alumnado que forma parte del centro y más aún a los que demandan una atención especial, pero sin olvidar en todo momento la participación activa de la familia.

En definitiva, apostamos por una calidad de la enseñanza, llevando a cabo el principio recogido en la L.O.E. de normalización y no discriminación del alumno con necesidades específicas de apoyo educativo.

Adelma